El inicio de la nueva estación trae cambios en el entorno natural y ambiental que nos influye a todos los seres vivos, dejando al descubierto los secretos más bellos de la naturaleza. Además es una estación cargada de significado mitológico relacionada con la fertilidad y la fecundidad de la tierra y de las especies.
La primavera representa el crecimiento, la floración, el renacer y la vida. Con su llegada nace un momento de cambio dónde despedimos el letargo del invierno para dar la bienvenida a la luz y al renacer.
El origen etimológico del término primavera se refiere al primer verdor, en referencia a que en la época primaveral las plantas reverdecen.
Dependiendo del hemisferio en que nos encontremos la viviremos de Marzo a Junio en el hemisferio Norte y de Septiembre a Diciembre en el hemisferio Sur.
La llegada de la primavera es una de las estaciones más esperadas y que más cambios produce en la naturaleza, más horas de luz, progresivo aumento de las temperaturas, el florecer de la naturaleza, etc.

Al llegar la primavera y producirse tantos cambios a nivel ambiental que nos influye en nuestro sistema hormonal puede afectarnos y producirnos algunos trastornos denominados astenia primaveral.
¿Qué es la astenia primaveral?
Astenia significa sensación de falta de energía.
¿Qué síntomas tiene?
Además de la sensación de cansancio, la astenia se puede ver acompañada de:
– Somnolencia durante el día e insomnio al llegar la noche
– Cefaleas
– Hipotensión
– Falta de concentración
– Cambios en el estado de ánimo (mayor irritabilidad, tristeza y ansiedad)
– Pérdida de apetito
– Disminución de la libido
Todos estos síntomas no tienen porque aparecer en todas las personas, ni todas con la misma intensidad.
¿Por qué se produce?
La astenia primaveral viene inducida por el cambio de estación.
Al alargarse el día estamos expuestos a más horas de luz solar, mayores presiones atmosféricas y mayor temperatura. Esto provoca cambios en nuestro organismo y también en nuestro comportamiento: salimos más, modificamos los horarios del día a día, etc. Todos estos cambios climatológicos y conductuales hacen que nuestro organismo funcione diferente. Se altera la secreción de distintas sustancias como por ejemplo la melatonina o el cortisol, como consecuencia de ello se pueden originar los síntomas que hemos comentado antes.
¿Qué puedo hacer para prevenir la astenia?
Hay muchas pequeñas ayudas que nos pueden venir bien para prevenir la astenia primaveral, pero ante todo: Estar tranquil@, la astenia primaveral dura una o dos semanas. Después de unos días tu cuerpo se habrá acostumbrado al cambio de estación y estará a punto para disfrutar del buen tiempo.
Tener en cuenta que si pasadas un par de semanas seguimos sintiendo cansancio y falta de energía podría haber otra causa y sería bueno pararse y evaluar.
Mientras tanto para seguir adelante con el mayor equilibrio posible.
¿Qué puedo hacer?
– Comer más verduras y fruta fresca, favorece a una buena digestión y nos aportan las vitaminas necesarias para disponer de más energía.
– Respetar las horas de sueño.
– Practicar ejercicio físico de forma regular. El ejercicio nos ayuda a equilibrar de nuevo la secreción del cortisol, para que sea más fácil la adaptación.
– Evita el consumo de sustancias excitantes como el café. Si necesitas más energía es mejor la vitamina que la cafeína.
– Practica habitualmente actividades de relajación como el mindfulness, la meditación y dar paseos en la naturaleza.
Con un poco de paciencia y buenos hábitos pronto estaremos recargados de energía positiva. La primavera asoma y desde su principio nos impregna con su frescura y entusiasmo. Nos aporta energía renovada, motivación e inspiración para iniciar nuevos proyectos o culminar aquellos que ya estaban en marcha.
Con la influencia de la luz siendo los días más largos y templados, es muy posible que nos sintamos más inspirados y que fluyan las ideas con más facilidad.
Después de la tormenta y el duro invierno llega la calma, es un tiempo de Eros, de renacer, de vida y de recargarnos e impulsarnos hacia adelante con más fuerza si cabe.